¿QUÉ ES LA ACUICULTURA?
¿Te has preguntado alguna vez por el origen de la dorada que comes en la cena o de la trucha arcoíris que tanto te gusta acompañar con jamón? Y es que tras estos deliciosos platos de pescado está nuestra protagonista.
De hecho, es muy posible que ya hayas oído hablar de ella en alguna ocasión, pero que aún no tengas claro qué es la acuicultura y qué significa. Y, para empezar a conocerla, nada mejor que acudir al origen de la palabra, ya que nace de la fusión de los términos latinos ‘acui–’ (agua) y ‘-cultura’ (cultivo). Así que la definición de acuicultura más sencilla es «el cultivo de organismos acuáticos como peces y algas».
Se diferencia de la pesca extractiva en que el proceso de crianza se realiza de forma controlada y sostenible en viveros especialmente diseñados para ello, por lo que para obtener las especies acuáticas no es necesario sustraerlas de las poblaciones en ecosistemas naturales de los océanos, ríos y lagos.
¿CUÁLES SON LOS GRANDES OBJETIVOS DE LA ACUICULTURA?
Para entender la importancia de esta actividad hay que ir más allá del significado de la acuicultura. En realidad, su concepto es mucho más amplio, pues representa un sector vital tanto para el mantenimiento y la conservación de los ecosistemas acuáticos del planeta como para el desarrollo y la calidad de nuestro sistema alimentario.
Es decir, no basta definir la acuicultura para valorarla en su justa medida. Hoy en día, su impacto en la sociedad es evidente y muy positivo, de ahí que grandes instituciones y agencias como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) den a esta actividad una enorme importancia.
ACUICULTURA Y SU SIGNIFICADO SEGÚN LA FAO
La FAO tiene su propia definición para la acuicultura. En concreto, se refiere a ella como:
«el cultivo de organismos acuáticos, incluyendo peces, moluscos, crustáceos y plantas acuáticas, que implica la intervención del hombre en el proceso de cría para aumentar la producción, en operaciones como la siembra, la alimentación, la protección de los depredadores, etc. La actividad de cultivo también presupone que los individuos o asociaciones que la ejercen son propietarios de la población bajo cultivo».
Pero lo más importante es lo que indica a continuación, porque recuerda que el cultivo de especies acuáticas busca, principalmente, incrementar la obtención de los organismos acuáticos y elevar su producción por encima del nivel sostenible que se obtiene mediante procesos naturales. O, dicho de forma más sencilla: considera que es una actividad fundamental para llenar las mesas —de nuestra generación y de las futuras— de ricos y saludables alimentos naturales como el lenguado o la corvina.
Esta es la razón por la que acuicultores, ingenieros y biólogos, entre otros, trabajan día tras día para complacer nuestros exigentes paladares con estas delicias. Aunque los procesos que están detrás de la acuicultura—y que van desde las técnicas de crianza de pescado hasta nuestros platos— son, para muchos, un mundo por descubrir…
¿NOS ACOMPAÑAS EN ESTE VIAJE POR LOS ENTRESIJOS DE LA ACUICULTURA DE ESPAÑA?
ACUICULTURA, UN SECTOR CLAVE PARA HOY E IMPRESCINDIBLE PARA MAÑANA
TIPOS DE ACUICULTURA
Nuestra travesía para conocer esta actividad arranca y nos invita a navegar por los diferentes entornos en los que se desarrolla el cultivo de los organismos acuáticos. De esta forma, si tenemos en cuenta cómo se realiza la acuicultura, encontramos:
- Acuicultura de agua salina o marina. Es aquella que efectúa sus actividades en agua salada, tanto en mar abierto como en la costa. De ahí que nos permita disfrutar de la calidad y del sabor de especies de pescado como la lubina, la dorada, la corvina, el rodaballo, el lenguado o el atún rojo. Además, para su crecimiento y desarrollo en estos entornos marinos, este tipo de acuicultura dispone de instalaciones bien preparadas. En el mar destacan los viveros flotantes, mientras que en tierra firme se cultiva también en tanques de agua salada. Y no podemos olvidarnos tampoco de los esteros, unos recintos que se localizan en las antiguas salinas.
- Acuicultura continental. En este caso, el cultivo de las especies acuáticas se realiza en agua dulce. Lo que nos lleva a adentrarnos en el interior y, más en concreto, a los establecimientos que se sitúan en los márgenes de los ríos. Lugares de donde salen pescados tan sabrosos como la trucha arcoíris o el esturión, del que también se obtiene el tan preciado caviar.
Acabamos de hacer un interesante recorrido por el agua salada y el agua dulce para conocer los diferentes tipos de acuicultura. Pero el viaje continúa, ya que ahora que estás al tanto de todo ello, es el momento de contarte el papel que juega esta actividad en el mundo y, en particular, en nuestro país.
¡Prepárate, porque es el momento de fondear la embarcación!
ACUICULTURA Y SU DEFINICIÓN GEOGRÁFICA
El entorno natural determina cada tipo de acuicultura, porque el medio ambiente influye en aspectos como el tipo de especies que pueden cultivarse, las técnicas que se utilizan y los desafíos o retos que hay que afrontar para producir estos alimentos naturales de alta calidad.
Así, algunos ejemplos más destacados de los diferentes tipos de acuicultura son:
- Estados Unidos, donde la actividad tiene un gran margen de crecimiento, ya que su producción acuícola representa un porcentaje pequeño del consumo interno de productos de mar. Se concentra principalmente en estados del sureste del país, como Mississippi, Luisiana y Florida; y cuenta con más de 3.000 granjas, donde el bagre es el principal protagonista (con más de 160.000 toneladas generadas en 2024).
- Noruega, país especialista en el cultivo de especies en jaulas flotantes en mar abierto —en sus fiordos—. En su caso, aprovechan las bajas temperaturas y la calidad del agua para cultivar su pescado estrella, el salmón.
- Chile, uno de los principales productores mundiales de salmón, así como de otras especies acuícolas como la trucha arcoíris y el mejillón. Su modelo se basa en una acuicultura intensiva, respaldada por un entorno natural privilegiado que ofrece aguas de alta calidad y condiciones óptimas de temperatura para el cultivo.
- Japón, referente asiático en acuicultura con una producción de 880.000 toneladas en 2023, el 23 % de la producción pesquera total del país. En su caso, el incremento de las temperaturas en el océano Pacífico y los cambios que se están produciendo en las corrientes —por el cambio climático— dificultan la pesca de especies como el salmón, por lo que la acuicultura terrestre está experimentando un gran crecimiento en los últimos años en el país nipón.
LA IMPORTANCIA DE LA ACUICULTURA EN ESPAÑA
¿Y qué hay de España? En nuestro país conocemos bien el significado de la acuicultura, porque disfrutamos de un entorno único y de gran riqueza para el cultivo controlado de especies acuáticas. No en vano, y teniendo en cuenta los tipos de acuicultura existentes, ¡somos el país de la Unión Europea con mayor cosecha en este sector! Hablamos de una producción en 2022 de 276.071 toneladas de especies acuícolas de la mano de nuestros acuicultores.
Este magnífico dato sobre la Acuicultura de España es una gran noticia para las economías de zonas costeras que viven del pescado, como la Comunidad Valenciana, Andalucía, Murcia o las Islas Canarias. Sin olvidarnos de Galicia. La ‘terriña’ es la mayor productora de rodaballo a nivel mundial. ¡Otro dato para celebrar!
Después de esta gran dosis de energía y optimismo, las buenas noticias continúan. Porque, aunque ya hemos pasado por tres de sus principales puertos —la definición de acuicultura, sus tipos y su importancia—, ¡todavía nos queda camino por recorrer juntos! Es más, la siguiente parada también viene cargada de ilusión y de buenas noticias.
LOS BENEFICIOS DE LA ACUICULTURA
Este es un viaje de grandes descubrimientos, y ahora que nos queda poco para el final, llegamos a los grandes beneficios de la acuicultura. Es decir, a sus tesoros más preciados. Son los siguientes:
- Además de descubrir qué es la acuicultura, en este artículo también hemos comprobado que es un sector imprescindible para la reproducción y conservación de determinadas especies de peces. El cultivo de estas especies reduce la presión sobre las poblaciones naturales y puede contribuir, incluso, a la repoblación controlada de ríos y mares.
- Sin la acuicultura no habría pescado para todos, ya que la acuicultura produce actualmente más de la mitad del pescado que comemos en todo el mundo. Sin esta mitad que ya aporta la acuicultura, este superalimento que es el pescado se convertiría en un alimento cada vez más escaso y caro, solo al alcance de una minoría cada vez más reducida.
- Contribuye al equilibrio natural y la sostenibilidad porque, si no existiera la acuicultura, el consumo de productos acuáticos se debería reducir considerablemente para respetar las cuotas pesca que protegen la biodiversidad en mares y ríos.
- Es un aporte vital para un sistema alimentario saludable y nutritivo. El valor nutricional de las especies acuáticas es bien conocido por todo el mundo, por lo que fomentar su cultivo es invertir en salud para los consumidores. ¡Y es que no hay nada como un buen rodaballo a la brasa o una buena dorada a la sal para comprobarlo!
- Permite establecer un control preciso sobre el pescado destinado a consumo, ya que la acuicultura española está sometida a los más altos controles de calidad. El seguimiento y la trazabilidad, desde que son alevines hasta tu mesa, nos permite saber cada detalle de su crianza y su alimentación y… ¡por eso el pescado de acuicultura está libre de parásitos como el anisakis!
- Contribuye a generar empleo y dinamizar la economía, especialmente en zonas rurales y litorales, donde hacen falta nuevas oportunidades para evitar la despoblación. Así lo refrendan los datos del informe de APROMAR “La Acuicultura en España 2024”, según los cuales, en 2022, este sector generó más 10.200 empleos directos y otros 25.634 puestos indirectos.
- Proporciona una gran variedad de alimentos de origen acuático, por lo que también brinda multitud de sabores y diferentes aportes nutricionales. En el caso concreto de la Acuicultura de España se cultivan tanto tesoros de agua salada —como dorada, lubina, corvina, anguila, atún rojo o rodaballo— como de agua dulce —trucha arcoíris y esturión—; y sin olvidar el fitoplancton, un recurso verde para alimentar a peces, producir productos cosméticos e incluso generar biocombustibles.
FUTURO DE LA ACUICULTURA
En un contexto social marcado por las previsiones de crecimiento demográfico sostenido —se estima que la población mundial será de 10.300 millones de personas en 2080—, las innovaciones tecnológicas y los retos medioambientales, la acuicultura se perfila como una actividad esencial para la alimentación del futuro.
Desde el punto de vista de la seguridad alimentaria será fuente prácticamente inagotable de alimentos saludables y respetuosos con el medioambiente, gracias a su alta eficiencia alimentaria, la calidad de su proteína y su baja huella de carbono —en comparación con la carne de ganaderías terrestres—. Además, jugará un papel clave para la conservación de las especies acuícolas, ya que, al complementar la pesca tradicional, alivia la presión sobre las especies silvestres más explotadas, facilita la reintroducción de especies en sus hábitats naturales y promueve su conservación genética.
Y, por último, continuará evolucionando y mejorando gracias a la tecnología, lo que permitirá incrementar sus estándares de calidad. Así, la innovación en el sector facilitará la automatización de procesos, la monitorización en tiempo real, la trazabilidad de los ejemplares, la mejora genética de las especies, de sus alimentos y vacunas, la implementación de sistemas de Recirculación Acuícola (RAS) o el aprovechamiento de la IA para optimizar la producción.
ACUICULTURA: MUCHO MÁS QUE UNA SIMPLE PALABRA
Como ves, al principio no hubiera sido justo que nos quedáramos en la definición de acuicultura, porque es una actividad que aporta valor a toda la sociedad. De hecho, si algo hemos comprobado a lo largo de este interesante recorrido es que los beneficios de la acuicultura son enormes. Para nuestro presente, pero también para lo más importante, nuestro futuro.
Y así llegamos al final. Ha sido un viaje enriquecedor en el que te hemos contado qué es la acuicultura, cómo se lleva a cabo y por qué es tan importante para nuestro país.