¿Cuántas veces has escuchado hablar del pescado azul y de sus beneficios para la salud? Y es que no es para menos, porque todas sus especies destacan por sus propiedades nutritivas y por sus múltiples bondades para nuestro organismo.
¿Te apetece conocerlas? ¡No tienes más que seguir leyendo para descubrir todo lo bueno que puede aportarte este tipo de pescado si lo incluyes en tu dieta!
Qué es el pescado azul y cómo distinguirlo
Antes de entrar en detalles, tienes que saber que tanto esta familia como la del pescado blanco son esenciales para seguir una dieta equilibrada. De hecho, ambas forman parte de la dieta mediterránea; ya que esta recomienda su consumo en unas cantidades que oscilen entre las 2 y 4 raciones a la semana.
Y aunque los llamamos así, cuando se trata de diferenciar el pescado azul y blanco a simple vista, lo más importante no está en el color del ejemplar, sino en su cola. La de los primeros es más alargada y tiene forma de flecha, por lo que su figura es más aerodinámica; mientras que la de los segundos es más plana y redonda, ya que, por lo general, no necesitan nadar con rapidez.
Características del pescado azul
Pero… ¿qué es lo que realmente hace especial a los pescados azules? Para responder a esta cuestión es importante saber que también se les conoce como pescados grasos. La razón es que estas especies tienen un porcentaje de grasa intermuscular que se sitúa entre el 8 % y el 15 %.
Aquí es donde viene lo importante, porque, aunque tradicionalmente se asocia la grasa con efectos negativos en el organismo, también hay formas de estos lípidos que son beneficiosas para la salud de las personas. Como, por ejemplo, los ácidos grasos Omega-3, muy presentes en las especies azules al igual que otras grasas poliinsaturadas ‘buenas’, como el oleico y el linoleico.
Además, otra buena noticia es que gracias a la acuicultura española podemos acceder a muchas de estas especies, por lo que a continuación te invitamos a conocer los mejores ejemplos de pescado azul cultivado en nuestro país.

Tipos de pescado azul de acuicultura
Hay un gran número de especies que pertenecen a esta familia, pero no todas se crían en vivero. Así que en este apartado te detallamos cuáles son las que cultiva la acuicultura de España, para que al acudir a tu punto de venta sepas qué pescado azul puedes comprar.
Pescados azules de acuicultura
Dentro de la familia azul y de sus especies de crianza de la acuicultura española, nos encontramos con:
- Pescado de agua salada (mares y océanos): anguila, seriola y atún rojo.
- Pescado de agua dulce (ríos y lagos): trucha arcoíris y esturión.
¿Te apetece conocer más en detalle a estas cinco especies? ¡Acompáñanos y te las presentamos!
Anguila
Este pez puede que sea el más fácil de reconocer. ¿Por qué? Sin duda, por su carismática forma alargada. Además, otra de sus características más llamativas es que, aunque se considera un pescado de agua salada, vive casi toda su vida en zonas de agua dulce, para desarrollar posteriormente sus últimas etapas de crecimiento en zonas costeras.
Seriola
Este pescado tiene un sinfín de nombres propios en función de la zona española en la que lo pidamos y quizá lo conozcas por pez limón, lecha o medregal. Así, te adelantamos que ofrece tantas opciones para disfrutarlo como nombres para denominarlo, porque su carne es tan exquisita que te sorprenderá la cantidad de preparaciones que se pueden hacer con ella. De ahí que te aconsejemos especialmente que pruebes la seriola de acuicultura.
Atún rojo
En efecto, el atún también está en la lista de pescados azules. Y la realidad es que, al hablar de él, es inevitable decir que es una joya gastronómica. Tanto por su sabor como por sus múltiples beneficios para la salud, entre los que destaca su alto valor proteico. Porque, para tu asombro, su contenido en proteína es superior al que contienen las carnes procedentes de la ganadería terrestre. ¡Ni más ni menos que 23 gramos por cada 100 gramos de atún rojo!
Trucha Arcoíris
Este pez camaleónico, capaz de mimetizarse con el entorno donde se desarrolla, es una de las especies con menor aporte calórico: se trata de una delicia culinaria que tan solo contiene 90 calorías por cada 100 gramos de ingesta. Además, es nuestro rey acuícola de agua dulce, ya que en España se cultivan más de 16.300 toneladas al año.
Esturión
Se trata de una de las especies más representativas del pescado graso. No en vano, gracias al cultivo de esturión podemos degustar el caviar. Es más, ¿sabías que este pez de acuicultura es el responsable del 100 % del caviar internacional que puedes encontrar en el supermercado?
Y, por si las exquisitas huevas que se extraen de él no fueran suficientes, este pescado también se caracteriza por poseer una carne jugosa, típica de platos como tartares o carpaccios. Razón por la que el esturión de acuicultura está logrando que la especie deje de ser considerada en alto riesgo de extinción, pues hasta ahora venía siendo víctima de la sobrepesca.
Otros pescados azules pero que no son de acuicultura
La pesca extractiva responsable se complementa a la perfección con la acuicultura española, así que también puedes consumir otras especies de gran valor nutricional que crecen y viven en nuestros ríos y mares de forma natural. Esta es una breve lista del pescado azul que se suele obtener de esta forma:
Sardina
La sardina también es pescado azul y es rica en ácidos grasos Omega-3, pues 8 de cada 100 gramos contienen este tipo de grasa. Propiedades nutritivas a las que hay que sumar también sus elevadas cantidades de vitaminas A, D y E, además de algunas del grupo B. Sin olvidar los minerales, dado que contiene potasio, hierro, fósforo y magnesio.
Pez espada
El pez espada es un pescado graso conocido por su pico largo, el cual utiliza como una espada para defenderse de sus depredadores y atacar a sus presas. De hecho, es un animal agresivo que se atreve incluso con los que son bastante más grandes que él, como el pez martillo.
Aunque, desde el punto de vista de lo que nos interesa, de sus beneficios para la salud, el pez espada es muy rico en vitaminas (contiene la A, B1, B2, B3, B5, B6, B9, B12, C, D y E) y minerales (aporta calcio, fósforo, selenio, magnesio, potasio y zinc).

¿Por qué comer pescado azul?: beneficios para la salud
Saber diferenciar el pescado azul y el blanco es importante para que disfrutar de todas las ventajas que nos proporcionan los nutrientes del primero. En concreto:
- Es bueno para el sistema cardiovascular, porque ayuda a reducir los niveles de triglicéridos en la sangre y a disminuir tanto la presión arterial como el riesgo de trombosis, ya que favorece la circulación.
- Ayuda a seguir una dieta equilibrada, porque además de proporcionar proteínas de calidad, es un producto bajo en grasas saturadas. De hecho, sus proteínas magras estimulan la sensación de saciedad, facilitando que controlemos mejor nuestro peso.
- Refuerza nuestros músculos y huesos al aportarnos minerales como el calcio, fósforo y magnesio, así como vitaminas del grupo B y vitamina D.
- Contribuye a las funciones cerebrales, ya que se ha comprobado que sus ácidos grasos tienen una influencia muy positiva en el desarrollo del sistema nervioso y en la capacidad de aprendizaje y memorización de las personas.
- Favorece el crecimiento de los niños por el gran número de nutrientes esenciales presentes en el pescado azul, además de proteínas de calidad y aminoácidos. Y, en el caso de las personas adultas, también participa en el correcto funcionamiento del metabolismo por su aportación de ácidos grasos y yodo a la función tiroidea.
- Fortalece nuestra piel, pues contiene una proteína clave para su salud, el colágeno; y también aporta vitamina E, la cual tiene funciones antioxidantes que se encargan de mantenerla firme y joven.
- Tiene un efecto positivo en nuestra salud visual, dado que previene frente al síndrome del ojo seco y la degeneración macular.
¿Cómo preparar el pescado azul y consumirlo?
De forma general, se recomienda comer entre 2 y 3 raciones semanales de pescado. Y lo ideal es combinar especies de los dos tipos de familias, por las múltiples ventajas que aportan al consumidor.
Además, si te preguntas cómo debes cocinar el pescado azul para que no pierda sus propiedades, ten en cuenta que las mejores opciones son aquellas que incluyen métodos de cocción que no sometan a los productos a altas temperaturas o procesos de oxidación. De ahí que lo prioritario sea no freírlo ni sobrecocerlo.
De esta forma, entre las formas más sanas de prepararlo tenemos:
- Al vapor, ya que no requiere grasas añadidas.
- A la plancha, evitando sobrecalentar el aceite para no degradar los ácidos grasos.
- Al horno a baja temperatura, porque permite cocerlo de forma suave y uniforme; aunque es recomendable envolver la pieza en papel de horno o papillote para evitar su oxidación.
- En escabeche, pues ayuda a conservarlo y a mantener sus propiedades.
Consume pescado azul, ¡tu salud te lo agradecerá!
Tras la presentación de estos manjares y sus beneficios, imaginamos que ya estarás frotándote las manos y decidiendo cuál de ellos será tu próxima compra en el súper.
Pero ojo, recuerda que, consumiendo estos ejemplos de pescado azul no solo te beneficiarás de su exquisita carne y sabor, sino que también aportarás a tu organismo todos los nutrientes necesarios para presumir de una salud de hierro. Como, por ejemplo, los ácidos grasos Omega-3 y otros tipos de grasas insaturadas que caracterizan a este tipo de alimento y que, como ya te hemos comentado, tienen múltiples beneficios para nuestro organismo.
Así que, como ves, tienes muchas razones para hacerte fan del pescado graso. ¿Cuál es la tuya?
