Especies canarias de acuicultura
La acuicultura canaria está especializada en la crianza de dorada y lubina. Esta última especie puede presumir de ser una especie excepcional, creciendo hasta tallas superiores a en las granjas de la península. Y es que este pescado posee un gran tallaje que oscila entre 0,4 kg y 4 kg, contando, además, con una textura firme ideal para todas las elaboraciones, incluso en crudo. Estas estupendas cualidades hacen que sea uno de los pescados más deseados por los grandes chefs. De ahí que la lubina sea ingrediente principal de platos tanto vanguardistas como tradicionales ¡y con un sabor inolvidable!
La excelencia de calidad de estos pescados de origen sostenible, además de por su hábitat, pasa por una variable muy importante: su alimentación. Cumplen con unos exigentes requisitos de sostenibilidad con el entorno aprobados por la Unión Europea. Esto les aporta grandes valores nutricionales de omega-3 y vitaminas. Además, son una gran fuente de proteínas de calidad y de bajo contenido graso. Si todavía no la has añadido a tu dieta, ¡te invitamos a que lo pruebes!
Gracias a la versatilidad de estos pescados, son innumerables las preparaciones que se pueden hacer con ellos (al vapor, al horno, a la brasa, marinada, en sashimi, etc…) haciendo que estos nutrientes lleguen a nuestros hogares para que podamos disfrutar de unas ricas comidas saludables y contemos con una envidiable salud de hierro. De hecho, al consumir pescado de acuicultura, ¡estarás apostando también por la sostenibilidad!
Además de la dorada y la lubina, desde hace varios años se están realizando mediante estudios científicos para ampliar las especies de acuicultura que sean compatibles y sostenibles con este increíble entorno medioambiental. Una de esas especies es la seriola, que en Canarias se conoce como medregal.