Día mundial de los océanos
Hoy, Juan Carlos García, graduado en Ciencias Marina, nos acompaña en el Día Mundial de los Océanos para enseñarnos sobre la importancia de su conservación.
Piensa en el planeta Tierra, ¿Qué te imaginas? ¿Montañas, ríos, valles, bosques, desiertos? Hoy celebramos el Día Mundial de los Océanos, así que centremos tu visión en el mar.
Al pensar en el océano, tu mente habrá visualizado una amplia extensión azul con una definida línea en el horizonte que separa las olas del cielo. Somos organismos terrestres y cuando miramos al mar, lo hacemos desde la tierra.
Sin embargo, ¿qué se esconde debajo del horizonte azul?
¿Cómo de grande es el océano?
El océano representa 2/3 partes de la superficie de nuestro planeta. La extensión que llega a cubrir es gigantesca. Y no solo eso, la profundidad media del mar es de 3.700 metros. Esto implica que un organismo que cumple los requisitos, no solo puede viajar a lo largo y ancho del mar, sino que también puede desplazarse de la brillante superficie a las oscuras profundidades. Este fenómeno podría suponer en tu mente una Odisea, un viaje de locos al abismo. Sin embargo, la migración más grande que existe en nuestro planeta se da todas las noches del año, donde millones de organismos suben a la superficie para cazar.
Esta y mil maravillas más suceden todos los días bajo las aguas del azul. Conocemos tan solo un 10% del mundo marino y este pequeño porcentaje es suficiente para fascinar nuestra mente.
Por qué el Océano es nuestra Gran Barrera contra la Emergencia Climática
Los organismos más importantes del colosal océano son irónicamente los más pequeños. Las microalgas.
Aunque el Amazonas se haya ganado el título del Pulmón del Planeta y en gran medida lo sea, las algas son las verdaderas protagonistas, pues producen alrededor del 70% del Oxígeno que hay en nuestra atmósfera.
Si las algas mueren, estamos en un serio apuro.
Las algas reducen los gases de efecto invernadero
Además de producir oxígeno, tienen una función igual de importante: absorber el CO2 (dióxido de carbono).
En los polos del Planeta grandes masas de agua se hunden hacia las profundidades debido a la alta salinidad. Estas masas de agua contienen microalgas que han absorbido el CO2 de la atmósfera. Gracias a este fenómeno, grandes cantidades de CO2 están siendo secuestradas hacia el abismo.
“¡Qué bien! ¡Gracias a las algas nos estamos deshaciendo de gases invernadero!” La respuesta es sí, pero…
Por un lado, estas masas de agua volverán dentro de 100 años a la superficie, tiempo aproximado en el que se completa el circuito marino del agua. Por otro lado, que se hunda el agua depende de la formación de hielo en los casquetes polares. Si las temperaturas aumentan y no se forma hielo, se interrumpe la corriente.
Temperaturas extremas
El hielo de los polos es capaz de reflejar una buena parte del calor que llega a la Tierra. Perder los casquetes polares significa perder un escudo contra la radiación solar: las temperaturas aumentarán.
En el Océano Atlántico, la Corriente del Golfo se encarga de llevar agua caliente del Caribe al Polo Norte. Este transporte de agua caliente regula el clima en Europa.
Cuando los fríos vientos del Polo Norte viajan hacia el sur, dirección Europa, se encuentran con un mar templado. Este mar tiene la capacidad de regular la temperatura de las masas de aire, reduciendo el impacto del frío. Si la velocidad de la corriente disminuye, podría suponer un clima gélido en Europa durante los meses de invierno.
Fauna salvaje
El mundo actual y su biodiversidad son el resultado de millones de años de evolución. Alterar esta estructura no es una buena idea.
La sobrepesca y la contaminación marina impactan todos los días en la fauna marina. Los corales suponen una fuente de oxígeno importante para el planeta. Ofrecen comida y cobijo a los peces. Frenan el impacto de las olas y protegen los pueblos costeros de las tormentas.
Sin embargo, son sensibles al calentamiento global. Se estima que para 2050 todos los arrecifes de coral se encontrarán en riesgo de desaparecer.
Medidas que debemos implementar para la conservación de los océanos
Reducir emisiones
Para evitar el aumento de las temperaturas tenemos que reducir los gases de efecto invernadero. Para ello, podemos utilizar medios de transporte verde (bicicleta, coches eléctricos, etc.) y reducir nuestro consumo de carne (el ganado genera un porcentaje importante de gases). A nivel industrial son imprescindibles los estudios que determinan la huella de carbono que generan las grandes empresas, como está realizando Acuicultura de España, que actualmente está trabajando en medir la huella de carbono del sector. Esto nos permite medir su impacto y generar estrategias para disminuirlo. Europa lidera varios programas para mitigar el avance del cambio climático y cumplir los objetivos del Acuerdo de París.
Colabora con iniciativas locales
En los pequeños movimientos existe la chispa que enciende el fuego necesario para avivar los grandes cambios. En cada comunidad existen personas que lideran proyectos para recolectar residuos, limpiar playas, ofrecer productos libres de plásticos, etc. Estas organizaciones se encargan de solventar los problemas de tu comunidad. ¡Y qué mejor lugar que tu hogar para empezar!
Apoya a las renovables
Las energías renovables son clave para un futuro más verde. Si tienes acceso a esta fuente de energía, ofréceles tu confianza.
Consumo responsable
Infórmate de la procedencia de los alimentos marinos. Las capturas en zonas alejadas del planeta han sido sometidas a una larga cadena de transporte. Apostar por el consumo local es clave. La acuicultura de algas y peces de España ofrece una de las mejores opciones para el consumidor.
La importancia de la educación
Formar a las nuevas generaciones es imprescindible para asegurar que cumpliremos con los objetivos de desarrollo sostenible en el futuro. Sin embargo, está en nuestras manos solucionar la crisis ambiental actual.
Sé un ejemplo a seguir. Contribuye al cambio e inspira a aquellos que te rodean a seguir tus pasos.
Celebremos el Día Mundial de los océanos con ilusión y optimismo. Protegiendo los Océanos estaremos salvando el Planeta. ¡Manos a la obra!
