Acuicultura y las aves migratorias
¿Sabías que la acuicultura es una gran aliada de las de las aves migratorias? El medio ambiente nunca deja de sorprendernos con sus prodigios. Uno de ellos son los impresionantes viajes estacionales de las aves migratorias en busca de mejores condiciones para pasar el invierno o para criar. Estos maratonianos viajes en grupo son posibles gracias a lugares intermedios de parada en los que las aves pueden descansar, alimentarse y esperar a que se den las condiciones meteorológicas óptimas para continuar su viaje. Nuestro país, y en concreto algunas de sus zonas dedicadas a la acuicultura, son importantes lugares de parada. Por tanto, esas zonas acuícolas a las que representa Acuicultura de España, son unos enclaves imprescindibles de apoyo para las aves en sus rutas migratorias. Los beneficios que genera la actividad acuícola en su entorno, incluyendo la protección de la biodiversidad, se denominan Servicios Ecosistémicos.
LA ACUICULTURA Y LAS AVES MIGRATORIAS, UN VIAJE QUE TE ENAMORARÁ
La llegada de las aves migratorias a las zonas dedicadas a la acuicultura aportan una gran riqueza a los ecosistemas de España. De hecho, somos su principal corredor migratorio en toda Europa Occidental. Aproximadamente doscientas del medio millar de especies de aves que pueden avistarse en la península Ibérica son migratorias. Se desplazan desde y hacia lugares tan alejados al sur como el Sahel africano, Kenia o Tanzania, y hacia el norte como Islandia, Finlandia o Noruega. Recorren distancias de hasta 20.000 kilómetros. Pocos animales pueden igualar su gran resistencia.
En España contamos con grandes humedales como los de la Laguna de La Nava en Palencia, la Reserva de la Biosfera de Urdaibai en el País Vasco o la Reserva Natural de la Laguna de Gallocanta en Zaragoza. Todos son importantísimos entornos naturales para las aves migratorias. Son lugares donde recargan fuerzas para retomar su apasionante viaje hacia zonas con condiciones estacionales más adecuadas para ellas.
En enclaves como el del Parque Nacional de Doñana en Huelva, la acuicultura juega un papel fundamental para conservar el Patrimonio Natural y generar empleo local. La acuicultura en este privilegiado entorno se ha realizado aprovechando antiguas salinas que datan de la época romana y que, conforman hoy un paisaje idílico de marismas haciendo posible que se desarrolle una importante actividad económica en un entorno protegido por la Red Natura 2000, que es una red de conservación de la biodiversidad de la Unión Europea.
Uno de los estudios de la Estación Biológica de Doñana señala la positividad de la acuicultura en sus áreas: “…para mantener la abundancia y diversidad de aves acuáticas en Doñana, es evidente la necesidad de gestionar zonas como Veta la Palma (para que proporcionen una alta biomasa de alimento (invertebrados y macrófitos) para las aves”.
EL COMPROMISO DE LA ACUICULTURA CON EL MEDIO AMBIENTE
Entre los grandes retos de la acuicultura sostenible de nuestro país, se encuentra la protección de las aves migratorias. Sus instalaciones a cielo abierto acogen y sirven como refugio a para la multitud de especies avícolas. Como se ha nombrado anteriormente, algunas de estas instalaciones, conocidas como “esteros” se encuentran en áreas protegidas de la Red Natura 2000 y sirven de paraguas de protección para el medio ambiente y la fauna que la que habita.
El cambio climático y la destrucción de hábitats naturales que sufre el planeta está afectando notablemente al modo de vida de las aves migratorias. Por ello es preciso tomar conciencia del problema y actuar cuanto antes. Ese testigo ha sido recogido por Acuicultura de España como uno de sus compromisos con el medio ambiente y la biodiversidad.
En este sentido, las empresas de acuicultura se han comprometido firmemente a favorecer las condiciones adecuadas de su actividad sostenible sin alterar el medio ambiente. Para ello, se han activado proyectos para estudiar la compatibilidad de la acuicultura y las aves migratorias. Y los resultados han sido muy favorables. Entre ellos, destacamos el proyecto que lidera el Centro Tecnológico de la Acuicultura (CTAQUA) titulado AQUA&AMBI en que colaboran empresas de esteros andaluzas con el objetivo de realizar actuaciones de recuperación de zonas degradas y favorecer la nidificación de aves a la vez que amplían la oferta de turismo ornitológico en la zona.
Otros proyectos
Otro proyecto interesante es el proyecto Aquabird 2000 que evalúa las interacciones entre las poblaciones de aves acuáticas y la actividad acuícola en el medio ambiente con la Red Natura 2000. Se trata de poner en valor el papel que juega dicha actividad en la conservación de la diversidad ornitológica. Lo llevan a cabo investigadores de la Universidad de Cádiz junto a CTAQUA y empresas productoras.
Los primeros resultados de sus estudios reflejan la relevancia de la acuicultura sostenible en la preservación de la diversidad de aves. Ha conseguido demostrarse que las instalaciones acuícolas han incrementado la biodiversidad de los espacios que ocupan. El caso más representativo es el de las instalaciones de Veta de la Palma en el Parque Nacional de Doñana. Esta finca alberga más del 60% de las aves acuáticas del entorno de Doñana. Durante las épocas de migraciones el porcentaje se eleva hasta el 80%.
En Veta de la Palma conviven flamencos comunes con poblaciones de anátidas como el ánade rabudo o la pato cuchara, o limícolas como la avoceta o la aguja colinegra. También da cobijo a más de 20 especies amenazadas durante sus épocas de reproducción o en sus migraciones. Y para muestra, un ejemplo claro: en Veta de la Palma se crían el 50% de Cerceta pardilla de Andalucía, una especie catalogada en “peligro de extinción” según el Catálogo Andaluz de Especies Amenazadas.
Queda un largo viaje para defender a las aves migratorias de las amenazas que las acechan. protegiendo los ecosistemas de las importantes áreas de parada para las aves migratorias y en definitiva, de toda la biodiversidad que en ellos se encuentra.
